Sabemos lo complicado que puede ser equilibrar la vida laboral y personal, especialmente cuando las demandas del trabajo nos superan. Aquí te comparto tres consejos prácticos que te ayudarán a ser más productiva sin sentirte abrumada. ¡Vamos a por ello!
1. Empieza con la técnica de los dos minutos A veces, comenzar una tarea se siente como lo más difícil del mundo. Aquí es donde entra en juego la técnica de los dos minutos. La idea es simple: en lugar de pensar en todo lo que tienes que hacer, solo concéntrate en los primeros dos minutos. Si tienes que hacer un informe, no te obsesiones con el proyecto completo. Solo sientate en tu espacio de trabajo e inicia organizando lo que tienes que hacer. Una vez que empiezas, te sorprenderá lo fácil que es seguir adelante. Este pequeño cambio de enfoque puede ayudarte a superar la parálisis inicial y ganar impulso.
2. Aprovecha tus mejores horas del día
No todas somos madrugadoras, y eso está bien. Muchas de nosotras somos más productivas cuando cae la noche, y no hay nada de malo en eso. Escucha a tu cuerpo y descubre cuándo eres más eficiente. Si tu energía está en su punto máximo por la tarde o noche, no te sientas culpable por no seguir los horarios tradicionales. Lo importante es encontrar tus mejores horas y usarlas a tu favor, sin juzgarte por no encajar en lo que se considera "normal".
3. Prueba la regla 60-40-20
Esta técnica, creada por el neurocientífico Andrew Huberman, es fácil de aplicar y súper efectiva. Dedica 60 minutos a una tarea que requiera tu máxima concentración, luego 40 minutos a algo más repetitivo y, finalmente, utiliza 20 minutos para moverte. Puede ser una caminata rápida o algunos ejercicios en casa, lo que más te guste. Este equilibrio entre trabajo mental y físico no solo te mantendrá enfocada, sino que también te ayudará a cuidar tu bienestar general.
Recuerda que la productividad no es una competencia, es un proceso. Lo más importante es que encuentres lo que funciona para ti y lo adaptes a tu vida. Así que no te presiones demasiado, sigue estos consejos y verás cómo tu productividad mejora sin tanto estrés. ¡Tú puedes!
Wendy Acevedo
Experta en productividad y digitalización
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